Hoy fui al Ángel, es tan curioso la manera de festejar de nosotros los mexicanos, todo parece fiesta, de las buenas; nos gustan los buenos pretextos para ser tan tan hermanos.
Vivir en México es vivir en una gran fiesta, a veces la música es muy dramatizada, y otras, es tan alegre. Somos tan apasionados -sin medias tintas-, vivimos tan intensamente la vida que, a veces, pareciera que se nos acaba todo ese minuto, es como estar conscientes de que no viviremos para siempre y a la vez negarlo todo. ES BIEN CABRÓN SER MEXICANO!!! QUÉ CHINGÓN!!
4 de octubre de 2010, 11:20
Sí es muy chingón ser mexicano... Y precisamente por eso, duele, y mucho...